Cómo elegir una barra de ducha?

La barra de ducha es un elemento que a veces pasa desapercibido, pero que es muy importante. Se fija en la pared para mantener la alcachofa o mango de ducha a la altura correcta y, en ocasiones, incorpora accesorios que permiten colocar el jabón y otros productos de higiene. También se pueden colgar de ella accesorios sueltos, como cestas de ducha, esponjas, etc.

Ten en cuenta que es importante no confundir la barra de ducha y la columna de ducha. En el primer caso, la barra solo sostiene la alcachofa, mientras que en el segundo, sirve como estructura-columna para el suministro de agua, a una ducha fija y a veces, a distintos sistema de salida de agua (chorros de hidromasaje o jets).

Encontrarás barras de ducha que generalmente oscilan entre 60 y 90 cm. Como te puedes imaginar, cuanto más larga sea la barra, mayor será el rango de ajuste de altura del cabezal de la ducha. Por ejemplo, una barra de 90 cm es aconsejable para una familia con niños (ajustable según las alturas de los usuarios, que varían significativamente).

El diámetro va desde 18 hasta 25 mm. Obviamente, un diámetro da mayor resistencia a la barra, evitando que se doble al soportar el peso de la jabonera o una cesta. En cuanto a los materiales, el acero inoxidable es una buena opción (resistente, más duradero, no se oxida). En menor medida, el acero cromado también es una alternativa interesante (más barato que el acero inoxidable).

En Grifos.es además de los típicos acabados cromados contamos con series de barras de ducha con acabados en negro y blanco mate, oro y oro rosa.